Los de la mesa de atrás de ayer, nos dejaron un mechero y una perlita: a mí me gusta ver Amar en Tiempos Revueltos porque no pasa nada el otro le preguntaba que qué era eso, y el del mechero le contestó que una serie de medio día de Antena 3 de esas que nadie dice que ve. Pero ahí sigue, puesta en las casas de la gente que no ve esas series.
Nadie ve nada que no esté aprobado por HBO. Y si dices que ves algo no tan digno, es que es porque lo ve tu compi de piso, porque lo veía tú abuela y por eso te suena claro o porque cuando vas a casa lo tienen puesto tus padres.
Mira como decimos que Euphoria sí la vemos. Esa sí.
Cuéntame lo ponían los lunes o los jueves. Siempre le han dado esos días, y para mí era mi premio de lo que fuera que hubiera estado haciendo durante esa jornada. Es mi serie favorita.
En Cuéntame sí pasan cosas, pasa todo lo que pasó en España, y la pena es que en esta última temporada de la serie (última de verdad ojo) a mí también me pasan cosas todos los días y no he vuelto a ver Cuéntame como toca ver Cuéntame ni un día: a las 22:00h sentadita en el sofá.
Me encanta que los viernes por la mañana Twitter tenga sus TT y de repente uno de ellos sea Cuéntame. No sé con qué excusa dirán que lo ven los que tuitean, pero se ve que mucha gente “no la ve” para llegar a aparecer en ese ladito de la pantalla del ordenador.
Lo bueno es que no hace falta pedir un mechero para Marina a la gente de Twitter para saber qué dicen. No podremos ver sus caras pero sí sus gustos y con los gustos de la gente que al final consigue un TT nos hacemos una idea de lo que nadie ve, pero todos hablan. Así somos.
Pues a mí me pasa que tumbarme o ver Cuéntame es como sentir que estoy en casa de mis padres o como sentarte a la mesa para comer en familia. Aunque a mí me gusta y a mis padres no. ¡Me cago en la leche, Merche!