Los días de la semana
En el cole te enseñan los días de la semana casi antes que los animales de la granja. No antes, porque a la granja escuela hay que llegar preparado y entrenado pero lo siguiente sí, los días de la semana.
Cuál es cual, cuál va antes y cuándo es el fin de semana. En el momento en que alguno de la clase se da cuenta de que el viernes se acaba el cole, la clase entiende cómo funciona lo de las semanas.
En junio, en el último día de clase pero esta vez para que dure meses la despedida, se les olvida otra vez lo de los días de la semana. El lunes parece sábado y el miércoles ni te planteas en qué día vives. Y cuando dejas de pensar en qué día vives porque tú solo vives, te dejan de importar los días de la semana.
Aunque hoy sea domingo y las cartas toquen los sábados, llevo casi toda la semana sin saber qué día era cada día. Y estoy muy satisfecha con eso. Solo han hecho falta 4 días de vacaciones y un finde para olvidarme de mil años de cole (me he puesto a contarlos pero no sé cuántos años son de infantil, ¿alguien lo sabe? Yo creo que nadie, eso nunca se habla)
La semana pasada daba la chapa con lo de hacerse mayor pero no, y hoy añado otro logro sobre hacerse mayor pero no: no saber en qué día vives es vivir de verdad.
Así que ya sabemos, a olvidarnos de los días de la semana, que ya somos mayorcitos.